Suma preocupación por parte de los integrantes del Centro Asistencial de Barrio Carmen Luisa por la aparición, de hace más de un mes, de un panal de abejas que perjudica la atención de pacientes en el lugar «ya que algunos fuimos picados y no queremos que vuelva a ocurrir», indicaron.
Tanto médicos, como enfermeras y personal administrativos están preocupados por la gran cantidad de abejas que hay en el techo de dicho dispensario. «Por eso tomamos la determinación de asistir a nuestros lugares de trabajo pero no atender por el peligro que corremos todo. Solamente estamos atendiendo las urgencias que llegan», precisaron.
Aún no ha llegado la solución por parte de las autoridades sanitarias que «conocen del tema, pero hasta ahora lo único que hicieron por parte de la municipalidad fue tirar insecticida que no hizo absolutamente nada. Todavía no llegó ninguna solución para el personal como para la comunidad que no puede ser atendida».
De manera particular los trabajadores de la salud de este centro consultaron también con Bomberos, el INTA, algunos apicultores donde todos coinciden que no hay que fumigar o tirarle veneno a las abejas pero «tampoco sabemos cómo hacerlo porque nadie nos da una solución, aparte no somos nosotros los que debemos encargarnos». Además de las abejas hay nidos de gorriones que ensucian todo el lugar.
Un especialista contó que hay que sacar el techo y hacer un trabajo en profundidad, se necesita además la autorización de la Región de Salud para este centro que atiende alrededor de 50 pacientes por día.
