La reunión se llevó a cabo esta semana en Rafaela y fue encabezada por el secretario de Bioeconomía de la Nación, Fernando Vilella. También se realizó un encuentro con productores y entidades productivas en torno a la problemática. “Solicitamos que a través del Banco de la Nación Argentina se trabaje en una línea de financiamiento para los productores afectados”, aseguró el ministro de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini.
La ciudad de Rafaela fue escenario esta semana para el desarrollo de una mesa política y técnica donde se trabajó en posibles soluciones para la prevención y mitigación del impacto de la chicharrita del maíz en la productividad de regiones como Córdoba, Santa Fe, Corrientes y Santiago del Estero.
La actividad, que fue encabezada por el secretario de Bioeconomía de la Nación, Fernando Vilella, contó con la presencia del ministro de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini; del secretario de Agricultura y Ganadería, Ignacio Mántaras y el secretario de Infraestructura Productiva, Mauricio Basso. También participaron referentes de INTA, SENASA, INAES, Ministros, secretarios y equipos técnicos de Córdoba, Entre Ríos, Santiago del Estero, Chaco, Corrientes, Catamarca, Formosa, Jujuy, Salta Buenos Aires y Tucumán.
En este sentido, vale destacar que la provincia de Santa Fe está a la vanguardia del abordaje de la problemática del achaparramiento en maíz, ya que fue trabajada en ámbitos institucionales a partir de convocatorias del Ministerio de Desarrollo Productivo. Se realizaron dos reuniones de la Comisión de Emergencia y Desastre Agropecuario en las que se trató el tema. También, se trabajó sobre la temática en el ámbito de la Comisión de Protección Vegetal Santafesina (COPROVESA).
Trabajo coordinado
Tras la jornada de trabajo desarrollada en Rafaela, Vilella remarcó: “A partir de una serie de acciones que venimos trabajando y de investigaciones de distintas instituciones sobre la biología del insecto que nos permiten tener una base sobre la cual empezar a construir información diferente. Este trabajo tuvo un aumento inmediato de los cultivos de maíz”.
En este sentido, el funcionario aseguró: “Estamos generando una estrategia nacional, un comité de crisis y un comité técnico con las provincias, las organizaciones y productores del país. Hoy nos acompañaron las autoridades del Senasa, del Inase y del INTA como una forma de dar una visión clara de unidad frente a la problemática que es compleja”.
Finalmente, subrayó que “la solución para el próximo ciclo no va a resultar de un agroquímico ni de un material genético, sino de una fuerte coordinación entre estas cuestiones y otras más importantes que es el manejo de fechas de siembra, el manejo del maíz guacho, cuestiones de esa índole que necesita una fuerte coordinación”.
Santa Fe, a la vanguardia
Por su parte, el ministro Puccini, señaló que “llevamos a Nación la preocupación por este tema e inmediatamente se pusieron a disposición para estar presentes acá. Le solicitamos también a Vilella que a través del Banco de la Nación Argentina se pueda trabajar en la posibilidad de una línea de financiamiento para los productores afectados.
Se comprometió a trabajar el tema con todos los instrumentos y herramientas que tengamos y a hacerlo en equipo”. A continuación, Puccini convocó al “sector privado a sumar todos los avances que han hecho. Necesitamos este tipo de encuentros de trabajo para plantear los problemas y ver la forma, entre todos, de cómo solucionarlos y establecer protocolos de buenas prácticas”.
En tanto, Mántaras, precisó: “Desde Santa Fe, activamos la Comisión de Protección Vegetal dónde resolvimos un programa de monitoreo genérico, porque necesitamos un sistema nacional de vigilancia para que no nos ocurran estos hechos; un plan de información y comunicación, a nivel agrónomos y productores, para entender el fenómeno; y sumamos la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación a la mesa, para involucrar a la ciencia y tecnología en este capítulo”. Por último, manifestó que, “en cuanto al financiamiento, nos preocupa que el 60% de las hectáreas de maíz están comprometidas, esto nos descolocan en un montón de cadenas, cómo la láctea, la bovina, la porcina, la aviar, entonces proponemos poner foco en aquellos productores que han visto afectadas sus cadenas, por la falta de insumo forrajero, y también pensar en cómo financiamos la próxima campaña, más allá de los aspectos genético y fitosanitarios; es decir analizar el impacto macroeconómico, y en tal sentido ha sido importante la presencia de 11 provincias en la reunión con Nación”.