A partir de noviembre, casi 9 millones de jubilados y pensionados que dependen de ANSES recibirán un aumento del 3,5% en sus haberes, según anunció el Gobierno de Javier Milei.
La medida, que se oficializará en los próximos días, también incluye un «bono refuerzo» para los haberes mínimos, garantizando que ningún jubilado cobre menos de $322.872.
Con este ajuste, la jubilación mínima pasará a ser de $252.872, mientras que aquellos que perciban el bono refuerzo alcanzarán un total de $322.872.
Por otro lado, la jubilación máxima llegará a $1.701.582. Además, la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) se ubicará en $202.297, y las pensiones no contributivas en $177.010.
El incremento está vinculado a la fórmula de movilidad jubilatoria, la cual, tras su última modificación por decreto, se ajusta según la inflación informada por el INDEC.
El bono refuerzo de $70.000, que ya se otorgó previamente, beneficiará nuevamente a los jubilados con los haberes mínimos.
De esta manera, se asegura que el 70% de los titulares de jubilaciones y pensiones perciban un ingreso reforzado frente a la inflación.