Desde el Vivero Municipal de Avellaneda, el ingeniero Hugo Bernardis anunció una nueva etapa en el desarrollo del espacio: comenzarán con la producción hortícola a través del sistema de hidroponía, una tecnología innovadora que permite el cultivo sin suelo, utilizando soluciones minerales en agua.
“Estamos produciendo plantines florales y hortícolas junto con otras instituciones, como parte de una actividad diaria y formativa”, explicó Bernardis.
El vivero, que históricamente se dedicaba a la producción de plantines de árboles, amplía así su horizonte con una propuesta que combina producción, educación y comunidad.
Entre las variedades que ya se están preparando figuran lechuga, rúcula, acelga, remolacha, achicoria y verdeo, todas adaptadas a la época del año.
Bernardis destacó también que el vivero busca convertirse en un espacio educativo abierto: “El que quiera aprender puede acercarse. Más adelante vamos a informar las fechas de las capacitaciones, que serán breves pero con todo el conocimiento necesario para que quien participe pueda replicar lo aprendido en su casa”.
Estas capacitaciones incluirán contenidos desde la preparación del suelo hasta el sistema de riego, fomentando así la soberanía alimentaria, el aprendizaje y la participación vecinal.