La especie apareció frente a una vivienda ubicada sobre calle Belgrano 1400 pasando Jorge Newbery. Se trataba de una Ñacaniná, que tenía aproximadamente una longitud de 1,50 metros.
Fue avisado de la situación Ricardo Magnago, quien hace unos años atrás fue guardafauna en la región, y concurrió rápidamente hasta el lugar. Allí procedió a capturar la serpiente para luego transportarla y liberarla en su hábitat natural.
Ñacaniná, una serpiente acuática que es parte de la fauna de la zona. Ya su nombre en latín lo dice todo: Hydrodynastes gigas significa Reina del agua, y habita los humedales que rodean la ciudad de Santa Fe. La Ñacaniná, tal como la llamaban los guaraníes, es una de las serpientes más grandes que habitan la región. Puede llegar a medir hasta 3 metros y aunque es acuática también frecuenta ambientes terrestres.