«Impunidad» es el término que mejor califica el atentado atentado al edificio de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), ocurrido a las 9:53 horas del lunes 18 de julio de 1994, hace 28 años.
La explosión de un coche bomba frente a la sede —en Pasteur 633— provocó la muerte de 85 personas y dejó a más de 300 gravemente heridas y dio inicio a una causa judicial que casi tres décadas después sigue sin ser esclarecida.
La víspera del aniversario, el nuevo presidente de la AMIA, Amos Linetzky, convocó a «seguir la tradición de hacer oír juntos nuestra voz» y «exigir justicia y castigo a los culpables y responsables del atentado» que destruyó la mutual judía.
A cumplirse un nuevo año del atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), la comunidad judía renovará este lunes el pedido de justicia con un acto que volverá a ser presencial tras dos años de virtualidad como consecuencia de la pandemia.
Como sucede desde ya 28 años, a las 9.53, hora exacta en que el coche bomba explotó contra la sede de la mutual judía, se escuchará el sonido de la sirena y luego se leerán los 85 nombres de las personas que fueron asesinadas.
La ceremonia se llevará a cabo en la calle Pasteur 633, donde se encuentra la sede de la mutual, y tendrá como principales oradores al presidente de AMIA; Amos Linetzky; a Anita Weinstein, sobreviviente del atentado, y a tres familiares de víctimas fatales: Sofía Guterman, mamá de Andrea; Jennifer Dubín, hija de Norberto; y Marina Degtiar, hermana de Cristian. En representación del Gobierno asistirá el ministro de Educación, Jaime Perczyk.
Vidas truncadas
Desde la asociación, lanzaron la campaña «Vidas truncadas«, una nueva acción de recordación que, con la participación de numerosos referentes del medio artístico y cultural de nuestro país, insta a no olvidar a quienes perdieron la vida en el atentado terrorista, y a renovar y visibilizar el reclamo de justicia.
Mirando a cámara y sosteniendo las pancartas con los rostros de las personas asesinadas, (los mismos carteles que se alzan en los actos presenciales de cada 18 de julio sobre la calle Pasteur), los referentes que participan de esta iniciativa ponen su voz para traer al hoy a cada una de las historias que no pudieron continuar.