Luego de que Diputados aprobara en general la ley de Bases de Milei con 142 afirmativos, 106 negativos y 5 abstenciones, se dio paso a la votación en particular.

En este contexto, pasado el mediodía, ya habían aprobado la delegación de facultades, privatizaciones de empresas, la reforma laboral y el RIGI.

El primero en ser aprobado era uno de los más polémicos entre los bloques dialoguistas. Este artículo aborda las facultades al Poder Ejecutivo nacional “a disponer, en relación con los órganos u organismos de la administración central o descentralizada” ya sea «la modificación o eliminación de las competencias, funciones o responsabilidades», o «la reorganización, modificación o transformación de su estructura jurídica, centralización, fusión, escisión, disolución total o parcial, o transferencia a las provincias o a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires».

Luego fue el turno de las facultades delegadas para Milei y la privatización de empresas públicas.

El tercer punto aprobado por el de la reforma laboral. Se trata de un proyecto suavizado por los bloques dialoguistas y que lleva el sello del diputado Miguel Ángel Pichetto.

El legislador le puso un freno a la iniciativa ambiciosa que intentó plasmar la Unión Cívica Radical. Sostuvo que el proyecto del partido centenario no contaría con los avales necesarios en el Senado de la Nación.

Luego aprobaron el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI). El Título 7 del RIGI tiene varios capítulos. El primero en ser aprobado fue el que dispone la creación de ese régimen y el ámbito de aplicación, con 134 votos positivos, 109 rechazos y seis abstenciones.

El capítulo 2 de plazos y sujetos recibió 136 afirmativos, 109 negativos y cinco abstenciones, mientras que el capítulo 3 sobre requisitos cosechó 136 votos a favor, 110 rechazos y cinco abstenciones.

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