El concejal de Reconquista, Walter Kreni, compartió una reflexión con los vecinos de la ciudad, en la que cuestiona las prioridades del gobierno municipal en relación a los recursos invertidos en eventos como el Festival del Jaaukanigás.
A través de una carta, que inicialmente no fue publicada sino distribuida en grupos, Kreni expresó su preocupación sobre las carencias en servicios básicos y la necesidad de enfocarse en resolver problemas estructurales de la ciudad.
Si bien el festival fue un éxito rotundo, con una gran participación de la comunidad, Kreni destacó que, aunque se promueva como «gratis», el evento en realidad se financia con los impuestos de los vecinos, lo que plantea la pregunta de si estos recursos están siendo utilizados de manera adecuada.
En su mensaje, el concejal instó a reflexionar sobre si es apropiado priorizar celebraciones antes de cubrir necesidades esenciales como agua potable, cloacas, alumbrado público, recolección de residuos y el mantenimiento de las calles, cuestiones que aún afectan a numerosos habitantes de la ciudad.
Kreni subrayó que la cultura y el esparcimiento son importantes, pero deben ser equilibrados con las necesidades más urgentes de la comunidad. Según su planteamiento, la verdadera justicia social no debe medirse por la magnitud de los eventos, sino por la capacidad del municipio para garantizar los servicios básicos que mejoren la calidad de vida de los vecinos.
En su mensaje, el concejal llamó a los vecinos a reflexionar y exigir una gestión municipal que priorice el bienestar integral, sin dejar de lado las responsabilidades fundamentales que contribuyen al desarrollo real de la ciudad.
Carta completa:
Estimados vecinos,
El reciente festival organizado por la Municipalidad de Reconquista ha sido, sin duda, un evento multitudinario y vibrante. Celebrar juntos nuestra cultura y comunidad es valioso; sin embargo, es fundamental reflexionar sobre las dinámicas que subyacen a estos acontecimientos.
Nos invitan a creer que este festival es «gratis». Pero, en verdad, no hay eventos ni servicios sin costo. Los recursos invertidos provienen del esfuerzo de cada ciudadano a través de sus impuestos. Así, es legítimo preguntarnos: ¿estamos priorizando correctamente nuestras necesidades colectivas?
En nuestra ciudad, la realidad es clara: persisten graves deficiencias en servicios esenciales como agua, cloacas, alumbrado, recolección de residuos y mantenimiento de calles. Estas carencias afectan la calidad de vida diaria, sobre todo a quienes más necesitan del apoyo del Estado.
Como sociedad, debemos cuestionar si el espectáculo momentáneo compensa la falta de soluciones estructurales. ¿De qué sirve un festival brillante si nuestras casas carecen de agua potable, si nuestras calles se inundan tras cada lluvia, o si nuestras plazas se deterioran sin mantenimiento?
Es importante valorar la cultura y el esparcimiento, pero no a costa de abandonar nuestras responsabilidades fundamentales. La verdadera justicia social no se mide por luces y escenarios, sino por garantizar que cada hogar tenga acceso a los servicios básicos, por construir una ciudad en la que el progreso sea tangible en cada rincón.
Los invito a reflexionar y exigir una gestión que no solo nos convoque a celebraciones, sino que priorice el bienestar integral de nuestra comunidad. Una ciudad que aspire al verdadero desarrollo debe construir su futuro sobre cimientos sólidos, no sobre ilusiones pasajeras.
Con profundo respeto,
Ing. Walter Omar Kreni