La llegada del mes de junio traería consigo un nuevo incremento en los valores de los combustibles líquidos. Será debido al aumento de dos gravámenes: el ITC (Impuesto a la Transferencia de Combustibles) y el IDC (Impuesto al Dióxido de Carbono). Estiman que la suba en los surtidores será de alrededor de 1,50 peso por litro. La última suba fue aplicada a principios de mayo.