La nueva ronda paritaria en Santa Fe, sería sin «gatillo» y con la idea de acuerdos bimensuales.
Con los datos de inflación ya conocidos y tras el anticipo de funcionarios santafesinos, el gobierno y los gremios volverán a discutir la actualización de salarios en el sector público.
La convocatoria para esta semana había sido anunciada el miércoles pasado desde Reconquista, luego de la reunión de gabinete que tuvo lugar en esa ciudad. Desde allí, el ministro de Trabajo, Roald Báscolo, adelantó que «la composición de la propuesta que se trasladará a la paritaria está a cargo de Hacienda, en discusión con cada área: Salud, Educación y Gobierno en el caso de la paritaria central».
Los gremios ya manifestaron la urgencia por sentarse a negociar un nuevo acuerdo paritario con la gestión santafesina, luego del alcanzado entre las partes en mayo pasado.
Antes de eso, el ministro de Economía, Pablo Olivares, dejó en claro que “siempre el objetivo es cuanto más largo el plazo de los acuerdos, mejor. El problema es que ese plazo sea acorde a los intereses o a las posibilidades de ambas partes. Un plazo largo en una situación inestable de mucha impredecibilidad implica que alguna de las partes pueda tensar el acuerdo; uno por no poder cumplirlo respecto de lo que se tiene que pagar, y el otro porque se acordó un porcentaje que termina siendo superado por la inflación”.
Por su parte, el ministro de Educación de Santa Fe, José Goity, corroboró la intención del Gobierno local de avanzar en la celebración de acuerdos bimensuales con los sindicatos. “Aspiramos a que sea bimensual, pero hay cuestiones técnicas que estamos evaluando para ser sometidas a la discusión paritaria”, afirmó.
No obstante, aclaró que «hablar de dos, tres o cuatro meses todavía es prematuro porque se está trabajando en la propuesta, pienso que tiene que ser por los menos de dos meses. Prefiero que sea lo más extenso posible. La última propuesta fue para mayo-junio y vamos a tratar de sostener ese piso”.
Los gremios docentes adelantaron en tal sentido que sus expectativas van a que, como mínimo, la oferta vaya en línea con la inflación. Pero también que ya se contemple una recuperación del poder adquisitivo perdido durante el primer semestre del año.
En cualquier caso, desde el gobierno provincial ya dejaron de lado cualquier posibilidad de reponer un mecanismo de actualización automática por inflación, la llamada “cláusula gatillo”. Al respecto, Olivares puntualizó que “atar cualquier tipo de contrato a una variable (como la inflación) y estrictamente a lo que acontezca mientras existan riesgos latentes de una hiperinflación, es tremendamente imprudente porque en el fondo, uno es custodio de recursos públicos. Por lo tanto, una cuestión es ir negociando teniendo en cuenta cuál fue la evolución de la inflación para que el trabajador no pierda y dedicando todas las horas necesarias a la discusión que siempre es compleja; y otra es atar el destino del resto de los santafesinos a una situación que puede terminar siendo muy grave para el Estado”.