Un grupo de jóvenes que iban transitando por Ruta provincial A009 camino al Puerto Reconquista, encontraron una enorme víbora Curiyú al costado del camino frente a la curtiembre.
Según nos pudieron decir, la víbora medía alrededor de 3 metros de largo. Un muchacho la agarró para la foto, luego la soltó.
El hallazgo fue en horas de la siesta calurosa de este viernes 30 de enero.
Hubo diversas opiniones y aportes de los oyentes de Radio Amanecer.
Según Ricardo Magnago, quien fue guardafauna y conocedor de este tipo de animales, en comunicación con RADIO AMANECER, expresó que la presencia de estas víboras en estos lugares se debe a la crecida de los ríos.
La anaconda amarilla o curiyú es una especie de anaconda, de la familia Boidae, nativa del centro de Sudamérica. En idioma guaraní es llamada mbói kurijú.
Es más pequeña que la más conocida anaconda verde (Eunectes murinus); habitualmente alcanza longitudes de entre 2,5 y 4 m y un peso que puede superar los 40 kg, siendo las hembras de mayor tamaño que los machos. Como sucede con muchas serpientes de gran tamaño, el largo máximo que puede alcanzar esta especie es motivo de controversia,23 aunque, según algunos autores, se han encontrado ejemplares máximos hasta de 6 m,4 mientras que otros señalan que, raramente, se han registrado hembras que superan los 7 metros.
Su color de base es amarillo pardo con pintas y rosetas negras. Vive mayormente en hábitats acuáticos, incluyendo charcas, margas, bancos en ríos y arroyos lentos. Su dieta incluye venados, pecaríes, grandes roedores, aves, reptiles y también animales acuáticos como peces.