Por la crecida del río, la fuerza del agua junto con la vegetación arrastró, días atrás, el puente «El Dorado» sobre el Paraná Miní.
La estructura de madera de quebracho de 70 metros se desprendió y fue llevada por el agua, a la vista de los pescadores de la zona que con tristeza observaron este hecho de pérdida de patrimonio. Además, de perder una importante estructura, se quedaron sin conexión entre la Ruta 11 y la barranca del Paraná en jurisdicción de El Rabón.
Cabe destacar que los puentes datan de la época de la forestal y tienen más de 100 años.
Para evitar que suceda lo mismo con el puente el Paranacito, la comunidad de El Rabón se organizó para limpiar la vegetación, retirar los carrizales y mantener el área más segura.
Todo con el objetivo de que el agua pase por arriba y la vegetación no presione la estructura y la desprenda como sucedió con el puente El Dorado.