El personal de «Los Pumas» de Intiyaco logró esclarecer un insólito caso de abigeato en la zona rural de Cañada Ombú, sobre la Ruta Provincial N° 100.
Durante un patrullaje preventivo, los efectivos visualizaron un automóvil Volkswagen Gol Power 1.6 de color gris y decidieron detenerlo para una inspección. Al entrevistar al conductor, un hombre mayor de edad que se identificó como empleado rural de la estancia «La Guadalupe», éste admitió sin rodeos que había cometido un ilícito: “Me mandé una macana, traigo un ternero en el baúl”, confesó.
Tras abrir el baúl del vehículo, los policías Rurales encontraron carne de origen ilícito, específicamente cortes de novillo, que pesaban aproximadamente 80 kilos. Los cortes eran claramente trinchados con cuchillo, lo que corroboraba la versión del conductor.
Horas después, se presentó un hombre que se identificó como apoderado de la firma «Nutrynor S.A.», propietaria de la estancia «La Guadalupe», quien confirmó que el autor del faenamiento era empleado de la empresa. El apoderado explicó que el lunes 3 de febrero habían cargado 38 animales vacunos, incluidos 31 novillos de unos 400 kg y 7 novillos de invernada más pequeños. Tras exhibirle los cortes de carne decomisados, reconoció que pertenecían a uno de los novillos de invernada que había sido trasladado a la estancia el día anterior.
Siguiendo con las actuaciones, el personal de «Los Pumas» contactó al fiscal de turno, quien ordenó realizar una inspección en la estancia «La Guadalupe». Allí, los policías encontraron vestigios de sangre, patas y mondongo del animal faenado, confirmando que el novillo había sido carneado en el lugar. Con toda la evidencia recabada, se procedió a la aprehensión del peón rural, quien fue informado de sus derechos.
El caso continúa bajo la intervención de la unidad fiscal correspondiente, y se destaca como un ejemplo más de la eficaz labor del personal de «Los Pumas» en la lucha contra el abigeato en la región.