La diputada Alicia Gutiérrez, una de las autoras, aseguró que esta norma «cristaliza lo que Santa Fe ya tiene, un sistema modelo». Críticas a la descentralización y al financiamiento
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La Cámara de Diputados dio media sanción a la ley provincial de salud, lo que la mayoría de los diputados consideró como una deuda histórica que se empieza a saldar en la provincia. A diferencia de lo que sucedió con la media sanción a la ley provincial de Educación, que convocó a muchas personas y a la ministra del área, Claudia Balagué, en esta ocasión la aprobación se dio en un marco menos festivo que incluso no se contó en el recinto con la presencia de la ministra de Salud, Andrea Uboldi.
Lo que se aprobó fue un proyecto que sintetiza las iniciativas propuestas por el presidente de la Cámara baja, Antonio Bonfatti, y de la diputada Alicia Gutiérrez, quien aseguró: «Estamos cristalizando en una ley lo que ya existe en la provincia de Santa Fe, un modelo de atención de salud que es modelo en el país y en Latinoamérica con hospitales y centros de salud que se construyeron. Pero también con una mirada de la salud pública que tiene que ver con los derechos humanos, y la salud es un derecho humano fundamental».
«Sabemos que las leyes pueden derogarse o modificarse, pero estamos seguros de que con este sistema de salud que tiene la provincia va a ser muy difícil que se le pueda privar a los ciudadanos y ciudadanas de este derecho humano», agregó.
Entre los argumentos del oficialismo se sostiene que la Atención Primaria de la Salud «es pensada como la estrategia fundamental» y se menciona que desde el gobierno de Hermes Binner a la fecha se construyeron más de 100 centros de salud y que junto con la construcción de hospitales modelo conforman «la mayor inversión de la historia en la provincia en infraestructura de la salud».
Por su parte, el diputado Rubén Galassi, destacó la regionalización de esa atención primaria de la salud que permite evitar la concentración de la atención en las dos grandes ciudades como Santa Fe y Rosario estableciendo una reforma integral del segundo nivel de atención con hospitales regionales en Las Toscas, San Cristóbal, Las Parejas, Ceres y próximamente en Coronda.
La nueva ley prevé la organización del sistema de salud en tres subsectores. Uno es el Estatal o público, con tres niveles de atención y en todos con la gestión financiera y administrativa a cargo de autoridades designadas por el Ministerio de Salud.
Por otra parte se contempla la creación del Sistema de Información Provincial en Salud (SIPS), se establece la política de medicamentos e insumos médicos, se crean los Centros Únicos Regionales de Facturación y Recupero de prestaciones y servicios a beneficiarios de obras sociales y empresas de medicina prepaga.
La ley también determina las pautas para regular y fiscalizar los otros dos subsectores de la salud como el de la seguridad social y el privado.
Además como principios tiene a la salud como Derecho Humano Inalienable; una concepción integral de la salud, vinculada con la satisfacción de necesidades de alimentación, higiene, vivienda, ambiente, trabajo, los recursos aplicados en salud como inversión social priorizada; los bienes para la protección y el cuidado de la salud como bienes sociales; la regionalización sanitaria como instrumento de gestión que permite el abordaje estratégico de los problemas de salud en un territorio determinado, en proximidad con la población involucrada y sus necesidades; la descentralización con participación de la población en los niveles de decisión, acción y control.
Las críticas
Desde la oposición se centraron los cuestionamientos en la gestión territorial que se pronone y en que no se fija un piso al financiamiento. En ese sentido la diputada Chialvo defendió la iniciativa presentada por su par, Silvia Simoncini, y si bien reconoció que tiene grandes coincidencias con el que se terminó aprobando, también tiene marcadas diferencias.
«Las críticas tienen que ver con la administración en la gestión territorial que Bonfatti y Gutiérrez plantean ya que dicen que la descentralización debe ser por nodos y nosotros entendemos que esa distribución tiene que responder a la división política de la provincia y por lo tanto lo planteamos a nivel departamental», explicó.
Mientras que en cuanto al financiamiento del sistema de salud de la provincia, Chialvo remarcó que desde un principio se pidió un piso del 35% del total del presupuesto para la salud. «Entendemos que como está planteado no cubriría todas las necesidades. Tenemos presidentas comunales con muchísimas quejas respecto a este tema porque hoy muchas comunas tienen que estar asistiendo a los centros de salud porque no bajan fondos del Ministerio», sostuvo.
En defensa del proyecto aprobado, Gutiérrez dijo que cuando el proyecto sea ley «el Estado provincial estará obligado de ahí en más a financiar» la salud. «Yo quiero recordar que hoy, con la ley Samco, los responsables son las organizaciones de la sociedad civil. Pero no solo responsables de la administración, sino financieramente también y tienen que responder con sus bienes si sucede algún hecho irregular», aclaró.
«También en los hospitales de autogestión –continuó– se endeudan, nombran personal, y lo mismo pasa en los Samco aunque se pudo limitar bastante. Ahora le devolvemos la potestad al Ministerio de Salud de ser quien conduzca el sistema de salud en la provincia».
Para Gutiérrez «es redundante poner un piso de presupuesto» para la salud porque «lo que se utilizó en la provincia tanto en infraestructura como en personal» fue muy significativo. «Recuerdo que en esta Cámara, en su momento, nombramos 4.000 trabajadores que estaban en negro en el sistema de salud que heredamos del gobierno anterior al Frente Progresista», concluyó.
