Se consiguieron algunas sillas para ubicar en las calles frente a los bancos.
La idea es evitar el escandaloso amontonamiento que hubo el último viernes y que generó serias complicaciones y críticas a las autoridades por la decisión que tiró por la borda todo el esfuerzo de la cuarentena.
Ahora la idea es que haya sillas donde los jubilados y personas que cobran ayuda social puedan estar sentados pero además distanciados unos de otros.