Ignacio López, vecino de San Javier, informó que la empresa encargada de la construcción del Acueducto que llevaría agua desde el río San Javier hasta San Cristóbal y Tostado ha paralizado sus actividades por decisión del Gobierno Nacional.

Esta determinación deja sin trabajo a aproximadamente 100 operarios y genera gran preocupación en la comunidad.

Los trabajos en la obra se habían retomado en octubre con la promesa de avanzar a un ritmo lento pero constante. Sin embargo, la paralización actual deja en incertidumbre el futuro del proyecto, que es crucial para el abastecimiento de agua en el norte santafesino.

La infraestructura, cuyo obrador está ubicado en la intersección de las rutas 1 y 39, permitiría extender un ramal esencial para la provisión del recurso hídrico a más de 120 mil santafesinos, tanto para consumo humano como para el desarrollo productivo de la región.

López manifestó su preocupación ante la falta de explicaciones claras sobre los motivos de esta decisión. «Tenemos ríos en condiciones para potabilizar el agua, pero por una decisión política se demora su distribución. Esto genera incertidumbre y malestar en la comunidad, que necesita esta obra con urgencia», expresó.

La paralización afecta no solo a los trabajadores que quedan sin actividad, sino también a miles de familias que esperaban la concreción del acueducto para garantizar un acceso seguro y permanente al agua potable.

Ante esta situación, vecinos y sectores productivos exigen respuestas y soluciones para la reactivación del proyecto.