Desde el bloque de la UCR, las diputadas Marlen Espíndola y Silvia Ciancio, buscan entre otras cosas, que los medicamentos se den según lo que indican las guías de tratamiento, contar con los recursos económicos necesarios y con el apoyo emocional de un equipo multidisciplinario que acompañe el cuidado.
Una iniciativa que lleva la firma de las diputadas provinciales (UCR) Marlén Espíndola y Silvia Ciancio, impulsa crear en el ámbito santafesino un régimen especial de protección integral para infancias y adolescencias con cáncer. El proyecto, también apunta a que se cree un marco normativo específico de acompañamiento y seguimiento de la enfermedad.
Debe remarcarse que este es un trabajo en conjunto con un grupo de madres y padres de pacientes con cáncer y profesionales de la salud. “Ellos son el verdadero motor, no solo de este proyecto de ley, sino de esta lucha colectiva que busca el bienestar de cada niño, niña y adolescente”, contó en primer lugar Espíndola.
Para la legisladora, es de suma importancia “garantizar que las infancias y adolescencias cuenten con las mismas posibilidades”, es decir, lograr que los diagnósticos sean en tiempo y forma. En esta línea, aclaró: “Queremos promover que el suministro de los medicamentos se dé según lo que indican las guías de tratamiento, contar con los recursos económicos necesarios y con el apoyo emocional de un equipo multidisciplinario que acompañe el cuidado, según corresponda”.
Asimismo, sostuvo: “Bregar por los derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos de las infancias y adolescencias con cáncer es un compromiso que tenemos como sociedad, como legisladoras y legisladores”.
Por su parte, Ciancio remarcó que a lo largo y a ancho de la provincia, las “realidades que viven quienes atraviesan por esta situación” no son iguales. “La detección precoz, los tratamientos, el acompañamiento que necesitan tanto los pacientes como sus familias, la protección y la garantía de su calidad de vida, las cuestiones estructurales y edilicias y las diversas situaciones de vulnerabilidad, presentan diferencias”, describió.
“Es fundamental bregar por la igualdad de derechos de estos pacientes, para que puedan gozar de la máxima calidad de vida, transitar y tratar esta enfermedad de la mejor manera para que se genere una pronta recuperación.
Necesitamos que las familias renueven esperanzas al igual que sus hijas e hijos”, aclaró.