En una reciente comunicación con Radio Amanecer, el Ministro de Obras Públicas de la provincia de Santa Fe, Lisandro Enrico, expresó su profunda preocupación por el estado de las rutas nacionales en la provincia, particularmente las rutas 11, 33 y 34.

Enrico reiteró sus críticas hacia la falta de inversión por parte del gobierno nacional en el mantenimiento de las carreteras y la insensibilidad que, según él, ha mostrado la administración central ante la situación.

El ministro señaló que este problema es histórico, pero que en los últimos tiempos ha empeorado. «La postura del gobierno nacional es no poner un peso en las rutas, lo que genera un peligro constante para quienes transitan por ellas. Los accidentes son frecuentes, y uno viaja con una constante sensación de tensión, especialmente en días de lluvia», afirmó.

El funcionario también criticó la falta de respuesta por parte de la Nación, señalando que, a pesar de los esfuerzos y gestiones constantes del gobernador Pullaro, la situación sigue sin mejorar.

«El gobierno nacional no solo no pone fondos para el mantenimiento de las rutas, sino que también se niega a ceder el control para que la provincia pueda intervenir y mejorar la situación dentro de sus posibilidades», agregó Enrico.

En este contexto, el ministro mencionó que, debido a la inacción nacional, la provincia ha tenido que realizar aportes propios para reparar las rutas, como la provisión de más de 900 toneladas de asfalto para tapar pozos en la ruta 11, una tarea que, según el ministro, no le corresponde a la provincia.

«El interior del país paga impuestos y retenciones para que la Nación se encargue de este proceso, pero no cumplen con lo mínimo», sostuvo.

También recordó que, a principios de año, el gobierno nacional firmó un convenio para realizar trabajos de mantenimiento en las rutas, pero hasta el momento no ha cumplido con su parte. «Nos encontramos en una situación en la que no podemos dialogar de manera racional ni gestionar de forma efectiva. Los compromisos asumidos no se cumplen», lamentó.

Finalmente, el ministro destacó que, en el caso de que los accidentes ocurridos en la ruta 11 fueran en una arteria como la Avenida 9 de Julio, es probable que la situación fuera diferente. «Si las muertes que ocurren en la ruta 11 fueran en la 9 de Julio, seguro habría más recursos para reparaciones», opinó.

En relación a las reparaciones que actualmente se están llevando a cabo en Malabrigo, Enrico explicó que esto se logró tras presentar un amparo judicial. «No nos queda más que seguir este camino y acudir a la justicia, porque es la única manera en que parece que algo entienden», concluyó el ministro.