Monica Corgniali, madre de Fernando Francovich, el camionero asesinado en Chaco hace dos años, informó que hubo traslado de los detenidos en el marco de la causa que investiga la muerte de su hijo. A pesar de los avances, Corgniali expresó su desconfianza en la justicia y advirtió que, en caso de que los responsables queden en libertad, no dudará en tomar la justicia por mano propia.
Según relató Corgniali, el 27 de diciembre, el comisario general de Chaco la notificó sobre el traslado de Banegas a una penitenciaria, debido a la peligrosidad del detenido. La madre de Fernando criticó el retraso en la decisión, ya que, a su entender, fue necesario un largo tiempo para que se tomara esa medida.
Asimismo, el 3 de enero, el comisario le comunicó que los otros dos detenidos, Cárdenas y Giménez, también fueron trasladados a otra penitenciaria.
Corgniali expresó su preocupación por la posibilidad de que los detenidos escapen nuevamente, recordando que tanto Giménez como Banegas estuvieron prófugos en el pasado. «Me cuesta confiar en la justicia», señaló, y agregó que han ocurrido demasiadas irregularidades en el caso, incluyendo el retraso en la toma de decisiones, la desaparición de pistas y la falta de resolución del caso.
La madre de Fernando también cuestionó al juez de garantías, quien rechazó el pedido del fiscal de avanzar con un juicio por jurado.
Ahora espera que se presente una nueva solicitud con pruebas adicionales para que finalmente se autorice el juicio. No obstante, expresó su preocupación por las tácticas dilatorias de los defensores, que podrían intentar lograr la liberación de los acusados basándose en el paso del tiempo, ya que han estado bajo prisión preventiva.
En relación con los acusados, Corgniali resaltó que Celestino Cárdenas tiene más elementos en su contra, ya que su ADN fue encontrado en el camión de Fernando, lo que refuerza su implicación en el crimen. Para ella, no debería ser liberado.
Con firmeza, Corgniali concluyó: «Si quedan libres, es para hacer justicia por mano propia».